Aumento de la judeofobia en España.
Esta semana se hacía público que la Liga Anti Difamación confirmaba que España está sufriendo un importante aumento del antisemitismo este último año. Señores, sin incluir los años de la Alemania Nazi, a este paso vamos a ganar en antisemitismo a la propia Francia que llevaba un récord continuo desde el caso Dreyfus de 1895.
Es curioso este dato, puesto que en España, uno de los países con menos judíos de toda la UE, viven aproximadamente 30.000 judíos, es decir un 0,075% de la población total (aprox).
Parte de la culpa según dicho informe, se la llevan los rotativos de mayor tiradaEl País y El Mundo por sus viñetas y artículos de opinión que comparan al Estado de Israel con el nazismo y de cometer supuestos crímenes contra la humanidad. Y como el lector medio que parece estúpido, culpabiliza a israelíes-judíos y judíos (no-israelíes, ya que la gente cree que el 99,9% de los israelíes son judíos), creando así una atmósfera inquisitorial donde todos los judíos siguen siendo asesinos de jesus, beben la sangre de niños cristianos y controlan las riquezas del Estado. Vamos, que por mucho pertenecer a la UE y que circule el euro por nuestras manos, las mentes del 75% de los españoles está ancladas en 1492.
Estos “periodistas” que en lugar de informar juzgan, se encargan de omitir la realidad de una Nación Soberana, tratan de vender una imagen falsa con el propósito de desprestigiar a la única Democracia de Oriente Medio, dónde viven 1,5 millones de árabes (palestinos) con más derechos que ningún palestino de la Franja de Gaza o Cisjordania. Es decir, el 19% de la población israelí es palestina y son tratados como humanos (tampoco se les expulsa como a los judíos en Gaza en 2006 y como tratan de hacerlo en Cisjordania), mientras que en ambos gobiernos palestinos Hamás y Fatah, unos utilizan a su pueblo como escudos humanos y otros hasta hace bien poco (Wets Bank), como kamikaces y estallar en supermercados, pizzerías y discotecas israelíes.
Para evitar esa oleada de atentados suicidas se construyó una Valla de Defensa, donde los atentados cesaron evitando muertes en ambos bandos. Aunque la prensa también se ceba en esta forma de defensa, ya que en Ceuta y Melilla lo llaman Valla y en Israel Muro.
Mientas que El País y El Mundo (y todos los medios en general) llaman asesinos, terroristas y criminales a los miembros de la banda terrorista ETA, a los terroristas palestinos les gustan denominarlos “activistas”, “militantes”, “mártires” y sus actos no son masacres, sino “respuestas a la incursión israelí en la franja de gaza”.
Para evitar conflictos, en el informe no se menciona que la mayoría de los instigadores de estos actos judeófobos y antiisraelíes son árabes e izquierdistas, que utilizan las manifestaciones pacíficas para lanzar sus mensajes de odio a todo judío viviente y que, para nada, les interesa el conflicto de oriente medio y menos aun, sus pobres palestinos.
Como tampoco se lee en el informe que gran parte de la culpa de que todos los sectores de izquierdas, los progresistas y los menos progreSiStas, sean judeofobos, viene de mano del gobierno socialista español y su imagen poco amistosa con el gobierno de Israel. Ya que todas las manifestaciones contra la Guerra dirigidas por el PSOE estaban impregnadas de un sentimiento y odio judío. Sin ir más lejos, esta semana el Ministerio de Vivienda boicoteo una Universidad israelí situada en el asentamiento de Ariel, en Cisjordania en “solidaridad” al pueblo palestino. ¿Alguien recuerda la quema de libros judíos por el régimen nazi? ¿Cuándo ocurrirá esto en nuestro país? Ya hay campañas de boicot contra productos, ¿por qué no también de sus libros?
Aunque estoy seguro de que ninguno de estos nuevos nazis que tanto gritan ¡boicot, boicot! serán capaces de dejar utilizar google o ver alguna película de la Metro… o evitar algunos de los siguientes productos…
Dell.
Lotus (software).
Oracle.
Taito Corporation.
Banca Rotschild.
AEG.
Wikipedia.
Metro-Goldwyn-Mayer.
20th Century Fox.
Warner Bros.
Universal Studios.
Marvel Comics.
Saatchi & Saatchi.
Calvin Klein.
Ralph Lauren.
Levi Strauss & Co.
El Corte Ingles.
Estée Lauder.
Max Factor.
Helena Rubinstein.
Elena Benarroch.
Mango.
Motorota.
En realidad, el anti-israelismo o anti-sionismo es un invento. Una patraña para camuflar el auténtico sentimiento anti-judío que tan arraigado está en la península. Un antisemitismo desproporcionado, irracional. Y estúpido.
Viñetas en El País, pincha aquí.
Esta semana se hacía público que la Liga Anti Difamación confirmaba que España está sufriendo un importante aumento del antisemitismo este último año. Señores, sin incluir los años de la Alemania Nazi, a este paso vamos a ganar en antisemitismo a la propia Francia que llevaba un récord continuo desde el caso Dreyfus de 1895.
Es curioso este dato, puesto que en España, uno de los países con menos judíos de toda la UE, viven aproximadamente 30.000 judíos, es decir un 0,075% de la población total (aprox).
Parte de la culpa según dicho informe, se la llevan los rotativos de mayor tiradaEl País y El Mundo por sus viñetas y artículos de opinión que comparan al Estado de Israel con el nazismo y de cometer supuestos crímenes contra la humanidad. Y como el lector medio que parece estúpido, culpabiliza a israelíes-judíos y judíos (no-israelíes, ya que la gente cree que el 99,9% de los israelíes son judíos), creando así una atmósfera inquisitorial donde todos los judíos siguen siendo asesinos de jesus, beben la sangre de niños cristianos y controlan las riquezas del Estado. Vamos, que por mucho pertenecer a la UE y que circule el euro por nuestras manos, las mentes del 75% de los españoles está ancladas en 1492.
Estos “periodistas” que en lugar de informar juzgan, se encargan de omitir la realidad de una Nación Soberana, tratan de vender una imagen falsa con el propósito de desprestigiar a la única Democracia de Oriente Medio, dónde viven 1,5 millones de árabes (palestinos) con más derechos que ningún palestino de la Franja de Gaza o Cisjordania. Es decir, el 19% de la población israelí es palestina y son tratados como humanos (tampoco se les expulsa como a los judíos en Gaza en 2006 y como tratan de hacerlo en Cisjordania), mientras que en ambos gobiernos palestinos Hamás y Fatah, unos utilizan a su pueblo como escudos humanos y otros hasta hace bien poco (Wets Bank), como kamikaces y estallar en supermercados, pizzerías y discotecas israelíes.
Para evitar esa oleada de atentados suicidas se construyó una Valla de Defensa, donde los atentados cesaron evitando muertes en ambos bandos. Aunque la prensa también se ceba en esta forma de defensa, ya que en Ceuta y Melilla lo llaman Valla y en Israel Muro.
Mientas que El País y El Mundo (y todos los medios en general) llaman asesinos, terroristas y criminales a los miembros de la banda terrorista ETA, a los terroristas palestinos les gustan denominarlos “activistas”, “militantes”, “mártires” y sus actos no son masacres, sino “respuestas a la incursión israelí en la franja de gaza”.
Para evitar conflictos, en el informe no se menciona que la mayoría de los instigadores de estos actos judeófobos y antiisraelíes son árabes e izquierdistas, que utilizan las manifestaciones pacíficas para lanzar sus mensajes de odio a todo judío viviente y que, para nada, les interesa el conflicto de oriente medio y menos aun, sus pobres palestinos.
Como tampoco se lee en el informe que gran parte de la culpa de que todos los sectores de izquierdas, los progresistas y los menos progreSiStas, sean judeofobos, viene de mano del gobierno socialista español y su imagen poco amistosa con el gobierno de Israel. Ya que todas las manifestaciones contra la Guerra dirigidas por el PSOE estaban impregnadas de un sentimiento y odio judío. Sin ir más lejos, esta semana el Ministerio de Vivienda boicoteo una Universidad israelí situada en el asentamiento de Ariel, en Cisjordania en “solidaridad” al pueblo palestino. ¿Alguien recuerda la quema de libros judíos por el régimen nazi? ¿Cuándo ocurrirá esto en nuestro país? Ya hay campañas de boicot contra productos, ¿por qué no también de sus libros?
Aunque estoy seguro de que ninguno de estos nuevos nazis que tanto gritan ¡boicot, boicot! serán capaces de dejar utilizar google o ver alguna película de la Metro… o evitar algunos de los siguientes productos…
Dell.
Lotus (software).
Oracle.
Taito Corporation.
Banca Rotschild.
AEG.
Wikipedia.
Metro-Goldwyn-Mayer.
20th Century Fox.
Warner Bros.
Universal Studios.
Marvel Comics.
Saatchi & Saatchi.
Calvin Klein.
Ralph Lauren.
Levi Strauss & Co.
El Corte Ingles.
Estée Lauder.
Max Factor.
Helena Rubinstein.
Elena Benarroch.
Mango.
Motorota.
En realidad, el anti-israelismo o anti-sionismo es un invento. Una patraña para camuflar el auténtico sentimiento anti-judío que tan arraigado está en la península. Un antisemitismo desproporcionado, irracional. Y estúpido.
Viñetas en El País, pincha aquí.
David Adael
23 de septiembre de 2009
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